jueves, 17 de octubre de 2013

SEGUNDO ANIVERSARIO DE LA BOUTIQUE DE LA REPOSTERIA



Parece mentira... Dos años ya!!!!!

Es cierto que el tiempo pasa rápido, pero si echo la vista atrás... los días de  La Boutique de la Repostería, han tenido un largo proceso. Cuántas emociones encontradas!!!!!

¿Sabéis algo? A veces tengo un sentimiento de culpabilidad terrible. Desde que se abrió La Boutique, creo que le dedico mucho tiempo a ésto. Me paso la vida haciendo flores, bocetos, preparando cursos... Creo que no le dedico suficiente tiempo a mis hijos. Pero, ayer, mi niño tenía que hacer un trabajo para el cole. Necesitaba una cartulina y, de camino a comprarla, le pregunté: ¿sabes ya de qué vas a hacer tu trabajo? Y me respondió: "De tu profesión, mami, de tus tartas. Mi trabajo lo voy a hacer sobre tí". Y yo, con los ojos abiertos como platos, le respondí: "Pero tú sabes que ésta no es mi profesión de verdad". Y añadió: "yo de la otra no sé nada". 
De pronto me dí cuenta de que estaba orgulloso de mí y de mis tartas, mis galletas y mis flores. Empecé a recordar que mi hija el año pasado hizo lo mismo: un trabajo de clase y llevó galletas, brownies... No sé si lo estoy haciendo bien, no sé si el tiempo que ésto les resta merece la pena, pero sí sé que mis hijos están orgullosos de mí y eso me hace feliz (ahora mismo me caen dos lágrimas por las mejillas). 



Ya me he limpiado el rimmel . Sigo.
Celebramos el segundo aniversario de una forma muy especial, con gente muy querida y con una ayuda inigualable. Estuve semanas diseñando la tarta y la mesa dulce. Dibujé diez mil bocetos (soy andaluza y exagerada). Lo primero que hice fue la peonía. No sabía dónde la iba a poner, pero sabía que estaría. Compré otros diez mil cacharros. Y al final, quedó así:


La tarta era de cuatro sabores: cereza, frambuesa, fresa y chicle. Si no recuerdo mal, llevaba 500 gr. mantequilla, 500 de azúcar, 650 de harina, 8 huevos, 150 ml. nata y aromas. Cada piso llevaba un aroma y un color diferente, por lo que los tuve que hornear en cuatro veces. Intentaba que los colores de dentro fueran los mismos de los de fuera. Se asemejaban:


Además, hice bizcocho de sobra para luego poder llenar los push-up pops. Puse capas de bizcocho, alternadas con capas de Swiss Meringue Buttercream con sabor a algodón de azúcar. 


También hubo mousse de fresa y chocolate blanco, en unos botecitos muy coquetos:


Además hice cupcakes y mini cupcakes. Todo muy rosa. Hubo cakepops de oreo. Y unas galletas divinas...




Y, por último, unas fotos de las personas que nos acompañaron. Son amigos de verdad. Las relaciones personales son difíciles, pero con ellos he encontrado serenidad y seguridad. Y éso no es nada que se pueda imponer, simplemente fluye.....



 Un beso gigante!!!!